Los coches, en muchas ocasiones, nos hablan. Sí, parece una locura, pero realmente es así. El único problema es saber interpretar lo que nos dicen, que no es precisamente con palabras. Cualquier anomalía o respuesta inesperada no habitual, puede ser sinónimo de que algo no va bien, de deterioro o, en el peor de los casos, de un aviso de algún tipo de avería inminente. Y, a veces, no saber detectarlo puede terminar en un defecto grave que inmovilice nuestro coche y nos suponga un gran gasto económico en la reparación.
Por eso, desde la plataforma “Elige calidad, elige confianza (ECEC)”, una iniciativa formada por hasta una veintena de los principales fabricantes de primer equipo del automóvil (entre los que figuran Bosch, Brembo, Continental, Magneti Marelli, Mann-Filter, Osram, Philips, Schaeffler, Tudor o Valeo, por poner solo algunos ejemplos), se encargan de ofrecer consejos y posibles señales de averías que puede el coche advertir antes de que sea demasiado tarde.
En este sentido, la última recomendación tiene como referencia el estado del embrague del coche. Un mal estado de este elemento imprescindible en los vehículos puede repercutir, no solo en el sistema de transmisión del motor, sino también en la durabilidad del propio motor o la caja de cambios y, por supuesto, afectar a la seguridad en la conducción.
El embrague es un elemento indispensable para el buen y seguro funcionamiento de un coche.
Para evitar males mayores, desde ECEC recomiendan hoy prestar atención a importantes señales que el coche nos puede indicar para advertir de que el embrague está llegando al final de su vida útil. Estas son las más importantes:
SÍNTOMAS DE QUE EL EMBRAGUE ESTÁ EN MAL ESTADO
- Si el coche se revoluciona demasiado, pero no coge velocidad, es una señal inequívoca. En estos casos es muy probable que el embrague patine, y que los forros del disco se hayan desgastado. En ocasiones, también, ese patinado genera un olor muy característico que también sirve de aviso.
- Otra señal de advertencia es que las marchas entren mal, de forma brusca. Si notas dureza en el accionamiento de la palanca de cambios al insertar marchas o quitarlas, incluidos ruidos de rozamientos metálicos en esos momentos, acude a un especialista para la revisión. Puede estar dando avisos de desgaste.
- Otra importante señal que da el coche indica que, si al soltar el pie del embrague, su recorrido al mínimo tiende a ponerse en movimiento rápidamente, estamos ante una advertencia de que el embrague está en mal estado, del mismo modo que si se perciben fuertes vibraciones procedentes de holguras, o chirridos al pisar el pedal de embrague, lo que significa que el collarín necesita ser sustituido.
CÓMO RALENTIZAR EL DETERIORO DEL EMBRAGUE
Desde ECEC, al mismo tiempo, advierten ya a los conductores que “la transformación que están experimentando los motores a causa de las regulaciones anticontaminación, tales como menor tamaño, menor cilindrada, mayor potencia y mayor eficiencia, provoca un incremento de vibraciones en la cadena cinemática, lo que reduce la vida útil del embrague”.
Por eso, al ser un elemento de desgaste, esta plataforma advierte de que su deterioro se incrementará en situaciones de conducción agresiva o brusca, en caminos irregulares o asfaltos en mal estado, al circular sobre tráfico denso especialmente y al efectuar arranques cuesta arriba.
Lo más recomendable para ESEC es realizar un mantenimiento completo del sistema de transmisión, incluyendo revisiones de embragues, volantes bimasa, cojinetes mecánicos o cojinetes hidráulicos. En caso de tener que reemplazar algún elemento, siempre será menor el coste que una posterior avería.